El Ayuntamiento calvianer continúa con su labor de promoción turística mientras Govern balear y Gobierno central siguen ignorando al primer municipio turístico de las Islas
La semana pasada se celebró en Londres la World Travel Market (WTM), una de las ferias turísticas más importantes del mundo, donde Calvià estuvo presente con un stand para promocionar su destino y la variada oferta de la que pueden disfrutar quienes visitan el municipio.
Esta labor promocional es en estos momentos de crisis económica más importante que nunca. Por ese motivo, el alcalde de Calvià, Carlos Delgado, acompañado por la teniente de alcalde delegada de Turismo, Kate Mentink; el director del Área de Turismo, Jaime Martínez y el gerente del Institut Calvianer de l’Esport, Manuel Onieva, se desplazaron a Londres, donde mantuvieron un encuentro con diversos turoperadores especializados en deporte para explicarles de primera mano las ventajas que supone disponer de una pista de atletismo y campo de fútbol de césped natural, así como de una importante red de instalaciones deportivas de primer nivel, que están a disposición de atletas y deportistas los doce meses del año. Al mismo tiempo, el Ayuntamiento continúa con su labor de promover otro de los grandes atractivos turísticos de Calvià, la Finca Pública Galatzó, imprescindible para todos los aficionados al senderismo, cicloturismo o amantes de la naturaleza en general.
Sin apoyo del Gobierno balear y central
El Ayuntamiento de Calvià, sin embargo, se encuentra sólo en esa necesaria e imprescindible tarea de dar a conocer las bondades turísticas del municipio, y tampoco cuenta con el apoyo necesario para sacar adelante iniciativas fundamentales para que Calvià pueda avanzar como destino turístico. Govern balear y central ignoran de manera reiterada las peticiones de Calvià, que únicamente pide tener exactamente el mismo trato que la Playa de Palma. Así, el municipio turístico más importante de Baleares no cuenta con el respaldo de ambas Administraciones para la creación de un consorcio que permita rehabilitar las primeras líneas de las zonas turísticas, como el que tiene la Playa de Palma, cuya reforma se convirtió en el proyecto estrella del pasado Consejo de Ministros celebrado el 24 de julio en Palma, en el que Calvià fue discriminado sin más. Y eso pese a que Calvià tiene 34 playas frente a las 4 de Palma; 54 kilómetros de costa frente a los 9,5 de Palma y 60.000 plazas turísticas, frente a las 20.000 de Palma.
Consorcio
Como se recordará, el Ayuntamiento aprobó, con el apoyo mayoritario y sin oposición del Consejo Sectorial del Turismo de Calvià, un plan anticrisis que, entre otras medidas, destacaba la creación de un consorcio entre administración estatal, autonómica e insular para ejecutar el Plan de Rehabilitación Integral de las Zonas Turísticas para el que el Ayuntamiento tramitó un concurso de ideas.
El proyecto ganador del mismo incluía también las propuestas diseñadas por el equipo de gobierno como la creación de un Museo de Arte Contemporáneo en Magaluf, un Palacio de Congresos en Santa Ponça, un Museo del Medio Ambiente y un Parque Tecnológico o un parque agrícola entre Magaluf y Cala Vinyes, entre otras muchas actuaciones.
El conjunto de este plan tiene un presupuesto aproximado de 535 millones de euros cuya financiación debería compartir sector público y privado a través del solicitado consorcio que, hasta el momento, ha sido ignorado por el resto de administraciones públicas, pese a que en el último Consejo de Ministros monográfico sobre Turismo, Zapatero aprobó un paquete de inversiones por valor de 1.000 millones de euros, de los que 107,6 se destinaban única y exclusivamente a las Islas, de los que no se concedía ni un euro a Calvià
Por otra parte, recientemente la Conselleria de Turismo del Govern balear ha dado un varapalo a la promoción turística de Calvià eliminando de un plumazo la partida económica que, para este fin, venía concediendo al Ayuntamiento.
El programa Turismo de Invierno se inició hace 13 años y desde 2003 estaba subvencionado por el Ejecutivo autonómico. Inicialmente, la ayuda era de 360.000 euros, aunque en los años 2007 y 2008 ya se redujo esa partida presupuestaria a 180.000. Sin embargo, para este ejercicio, el Govern se ha amparado en la falta de presupuesto para negar la subvención a Calvià, mientras que municipios como Alcúdia y Pollença sí que han recibido ayudas para programas turísticos.
Pese a ello, el Ayuntamiento de Calvià sigue trabajando en desarrollar actuaciones dirigidas a paliar la actual crisis y, por ello, en el último pleno se aprobaron las ordenanzas que regulan distintas bonificaciones para los establecimientos hoteleros.