La prevención del consumo de drogas propone, en líneas generales, promover un aumento de conciencia, tanto personal como comunitaria, sobre la importancia de los posibles problemas, daños, costes personales y sociales del consumo de drogas, aumentando la percepción de que estos daños son evitables o de que pueden ser reducidos por el individuo. Las actividades de prevención, por lo tanto, deben ir encaminadas por un lado a aumentar las capacidades y las habilidades personales de resistencia al consumo problemático de drogas y por otro lado a retrasar la edad de inicio de consumos experimentales (primeros contactos con las drogas) y de otras conductas adictivas. Un consumo o uso que empiece en edades tempranas tiene más probabilidades de llegar a convertirse en una adicción y/o un consumo problemático. Una de las funciones del PEMPACALVIÀ (Plan Estratégico de Prevención de Adicciones de Calvià) es aumentar el nivel de información de la ciudadanía sobre las drogas y otras conductas adictivas, en especial las relacionadas con la tecnología, sensibilizando a la población acerca de las señales de alarma que nos permitan ver que es necesario solicitar ayuda u orientación, intentando capacitar a las personas para hacer frente al problema si éste se presenta.